La Subsecretaria de Evaluación Social, Heidi Berner, destacó los alcances positivos que tienen las indicaciones aprobadas en la Ley de Inclusión Laboral, para facilitar el acceso al trabajo a personas discapacitadas.
La autoridad expuso en el Encuentro Nacional de Ejecutores del Convenio entre la Corporación de Asistencia Judicial y el Servicio Nacional de la Discapacidad (Senadis), el cual reunió a abogados de todo el país y directores de Senadis de la zona norte.
La autoridad aseveró que se aprobaron modificaciones a la Ley 20.422 y a la vez se incluyen modificaciones al Código del Trabajo, donde establece las cuotas de trabajadores discapacitados para que se desempeñen en las empresas. La ley es una obligación, “estamos hablando de incluir a personas con discapacidad y generar ambientes favorables altamente productivos y donde esperan incluirse en igualdad de condiciones y participación. Lo que hace esta normativa es apurar la inclusión”.
La Subsecretaria Berner expresó que lo que se busca es permitir la construcción de una sociedad inclusiva donde las personas en igualdad de méritos puedan acceder a un mercado laboral, así como la educación superior. «Como Ministerio de Desarrollo Social tenemos programas para ir acortando esas brechas como es Senadis, convenios en el área de Justicia, así como áreas de accesibilidad universal”.
La Ley de Inclusión Laboral que garantizará empleo a las personas con discapacidad en empresas con más de 100 trabajadores, además, permitirá acceder a empleo a las personas que tienen Pensión de Invalidez a causa de accidentes del Trabajo y establece, entre otras materias, una reserva de empleos del 1% para personas en situación de discapacidad en organismos del Estado, ya sean civiles y militares.
La fiscalización de esta ley la realizará en el sector público el Servicio Civil y el Servicio Nacional de la Discapacidad, y en el sector privado, la Dirección del Trabajo y el Servicio de Impuestos Internos.
Según la Encuesta Nacional de Discapacidad, Endisc II, en la región de Tarapacá existen un 17,7% total de personas en situación de discapacidad (PeSD), que asciende a 41.512 personas mayores de 18 años. De este total, un 7,8% presenta discapacidad leve a moderada, mientras que un 9,8% está en situación severa. Mientras que 82,3%, ascendientes a 193.201 personas, corresponden a la población sin situación de discapacidad.
De este total de personas con discapacidad, el 7,1% corresponde a hombres y 28,0 % a mujeres; de 18 a 44 años hay un 13%; 45 a 59 años 11, 3 por ciento y de 60 años y más un 40,4%.