Profesionalizar el emprendimiento, fortalecer la agrupación, difundir avances de género y la superación de obstáculos para lograr la autonomía económica de las mujeres, fue el objetivo de la Escuela de Emprendimiento Femenino 2017, una iniciativa impulsada por el SernamEG Tarapacá y la Universidad Arturo Prat, la cual tuvo su jornada de cierre con la certificación de alrededor de 20 mujeres de la Provincia de Iquique.
La directora del Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género de Tarapacá, Pamela Hernández y la Vicerrectora de Investigación, Innovación y Postgrado, Margarita Briceño, valoraron la constancia de las egresadas.
Entre los temas abordados está la gestión de empresas, instrumentos públicos, empoderamiento, ejercicio de derechos, habilidades blancas, educación financiera, uso de tecnologías de la comunicación e información. “Estamos muy contentas de aportar en la autonomía económica de las mujeres de la región y que va en directo beneficio de sus emprendimientos, porque lograron fortalecerse desde una nueva mirada mucho más amplia, consiguieron nuevas habilidades y eso les ayudará a seguir creciendo desde su empoderamiento”, señaló la directora de SernamEG Tarapacá, Pamela Hernández.
Sobre esto mismo, mencionó que estos espacios formativos se han realizado desde el año 2015. “El Programa Mujer, Asociatividad y Emprendimiento de SernamEG junto a Unap, nos ha permitido capacitar y certificar a 90 emprendedoras, lo cual es un importante avance en el desarrollo integral y profesional de las certificadas”, concluyó la autoridad regional.
La Vicerrectora de Investigación, Innovación y Postgrado de la Unap, Margarita Briceño, compartió una opinión similar, afirmando que “para nosotros como universidad, fue un gusto tenerlas en nuestra casa formativa, en especial cuando surgen estas alianzas estratégicas con SernamEG, que son claves en el resultado de hoy, pero nada sería posible sin el compromiso de todas ustedes de asistir y querer saber más”.
Margarita Contreras en representación de las mujeres certificadas, agradeció a los y las profesionales del Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género y a los y las docentes de Unap. “Cuando comencé con mi emprendimiento de podología, quise hacer cosas nuevas como jabones, pero no tenía logo ni nombre de mi negocio. Al principio no sabía qué hacer para darle mi identidad pero gracias al apoyo recibido aquí, logré crecer y aprovechar esta instancia porque es una gran escuela, formando lazos de amistad muy fuerte con mis compañeras”.