El Centro de Investigación Aplicada del Mar (CIAM) lanzó su nuevo Manual de Buenas Prácticas y Normas Pesqueras para la Sustentabilidad de los Recursos, cuyo objetivo principal es la difusión de las normas legales y pautas de buenas prácticas para ser aplicadas en la pesca pelágica de las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá y Antofagasta.
El documento, fruto de un trabajo de varios meses, busca ser una herramienta de consulta y guía de procedimientos para que los principales actores del sector desarrollen la actividad de captura en un marco de buenas prácticas y coherencia con el compromiso de contribuir de forma efectiva a la sustentabilidad de las pesquerías, a través del cumplimiento de las directrices expuestas en el documento.
En este sentido, el texto busca aportar en la toma de conocimiento de las asignaciones de cuota que le corresponden a cada empresa, incentivar el uso de acciones operacionales para minimizar la captura de fauna acompañante y asegurar el cumplimiento de los protocolos establecidos para la liberación de la pesca incidental, entre otras materias.
Con respecto a la interacción con el medio ambiente, este documento fomenta la toma de conciencia sobre la necesidad de su protección, con el foco puesto en el océano.
En lo referido a la prevención de la contaminación, el texto insta a evitar las prácticas de pesca erráticas, otorgando el tratamiento adecuado de los desechos generados a bordo, así como la necesaria mantención de las condiciones sanitarias en las naves y en las artes de pesca.
Las especies protegidas también son un tópico importante para la pesca industrial y que representa un permanente desafío. En esta línea, el documento realiza una síntesis de prácticas de excelencia y de la gestión requerida para estos casos, considerando el procedimiento de devolución al mar de todos aquellos mamíferos marinos, reptiles y aves marinas que hayan sido capturados en forma incidental. Para ello, la adecuada capacitación de las tripulaciones en lo relativo al conocimiento de especies marinas protegidas por las normas nacionales e internacionales resulta clave, razón por la que además este documento incluye elementos gráficos que apuntan en este sentido.
En aspectos más técnicos, el documento expone los requisitos para desarrollar la actividad extractiva, las áreas de operación de la pesquería, las condiciones de las vedas biológicas, las herramientas de fiscalización, entre otros.
“Este manual incorpora todas las actividades que se desarrollan hoy en la flota pesquera de la Zona Norte, y agrega algunas normas que son necesarias de considerar para fortalecer el trabajo sustentable en el ámbito de la pesca. Este documento busca ser parte de los equipos y herramientas que tiene todo buque”, explica el director ejecutivo del CIAM, Carlos Merino.
En este sentido, Merino señaló que se hará entrega del Manual a cada uno de los actores que participan en la pesquería del norte, proceso que estará vinculado a un plan de capacitación de los capitanes de pesca y de sus tripulaciones, de manera que los haga sentirse parte de un proceso vital para la proyección y futuro del sector.