Dos alumnas de tercero medio del Liceo Juan Pablo Segundo de Alto Hospicio y de la Academia Iquique fueron beneficiadas en la región de Tarapacá con una pasantía de cinco meses en Canadá con el objeto que adquieran una visión global del mundo, amplíen su capital socio-cultural y perfeccionen el manejo del inglés a través del programa “Pingüinos sin fronteras” de Corfo. Las becarias son Margiory Akemy Valery Tamayo Alejo y Catalina Alejandra Reyes Olivares, respectivamente.
Ambas estudiantes, que parten a Norteamérica el 31 de agosto próximo, fueron despedidas por el seremi de Educación, Francisco Prieto; y el director regional de Corfo, Raúl Fernández, con un desayuno en que participaron los padres y directores de los colegios.
La autoridad educacional felicitó a las seleccionadas, instándolas a continuar en la senda del estudio para alcanzar un mayor grado profesional, “fundamental para contar en el país con un mayor y mejor capital humano, que los pueda capacitar para iniciar emprendimientos globales y con innovación empresarial”.
El director de Corfo explicó que “la idea es que puedan sumergirse en esta nueva cultura, para adquirir una visión más amplia y completa del mundo antes de entrar a la educación superior o a trabajar, perfeccionando también su inglés, aumentando así sus posibilidades de empleabilidad en el futuro y su capital socio-cultural, para que también transmitan la experiencia a su entorno”.
Este programa fue diseñado para estudiantes que provienen de colegios municipales y particulares subvencionados, que de otra manera no podrían acceder a un programa de intercambio o pasantía estudiantil de estas características. Ya han sido 400 los alumnos beneficiados con estas becas que los han llevado a realizar pasantías en colegios de Canadá y Nueva Zelanda.
La iniciativa es un proyecto del ministerio de Economía en conjunto con el ministerio de Educación y ejecutado por Corfo. “Pingüinos sin fronteras” costea la pasantía en su totalidad, incluyendo los costos de traslados, pasajes, emisión de las visas, seguros, matrícula, colegiatura, mesadas, pagos a la familia receptora del estudiante en el lugar de destino, comidas, uniformes de colegio, entre otros gastos asociados, por un monto cercano a los 10 millones de pesos por alumno. Durante su estada, los jóvenes serán acogidos por familias canadienses, cuidadosamente seleccionadas.