En el dispositivo, que da inicio anticipado al Plan Invierno del Ministerio de Desarrollo Social y Familia, se entrega alojamiento, alimentación, abrigo y atenciones de salud e higiene, las 24 horas del día y los siete días de la semana.
Con un recorrido por las instalaciones, el Intendente Miguel Ángel Quezada y la seremi Katherine Aliaga, inauguraron en Iquique el albergue administrado por la Fundación para el Trabajo de la Universidad Arturo Prat, y financiado por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia, a través del Programa Noche Digna.
El recinto, que cuenta con veinte cupos, es parte del Plan Invierno, el cual se inició de forma anticipada en la región debido a la pandemia. Esta iniciativa contempla, además, la pronta apertura de un segundo albergue en Alto Hospicio y la ejecución de rutas de calle, para llevar prestaciones a las personas vulnerables en terreno, contando con todos los protocolos de higiene y seguridad dispuestos por la autoridad sanitaria.
En la inauguración del recinto, ubicado en el sector céntrico de la ciudad, el Intendente Quezada dijo que “este albergue nos permite dar una noche digna a las personas más vulnerables de nuestra región. Hoy, con la compleja situación que siguen atravesando nuestras comunas por el coronavirus, era de vital importancia tener a la brevedad este espacio para proteger a las personas en situación de calle, sumando un nuevo dispositivo a los que dispone regularmente el Ministerio de Desarrollo Social los 365 días del año”.
De la misma forma, la seremi de Desarrollo Social y Familia comentó que “debido a la emergencia sanitaria, se adelantó el Plan Invierno y comenzamos este albergue anticipadamente, que es administrado por la Fundación Unap. Aquí podremos dar alojamiento y alimentación a 20 personas, las 24 horas del día y los siete días de la semana, por cerca de seis meses. Esto, además, se reforzará prontamente con un albergue de similares condiciones y con asentamiento en Alto Hospicio”.
La seremi también explicó que ambos albergues y las rutas en terreno fortalecen la operatividad de la Mesa Regional de Calle, donde participan activamente municipios, servicios públicos, fundaciones, policías y la sociedad civil. “Este trabajo coordinado nos permite actuar articuladamente, en red, para dar apoyo, generar derivaciones oportunamente y, en definitiva, proteger al grupo más vulnerable de nuestra población”, puntualizó Aliaga.