Los pasillos de los servicios clínicos se llenaron de amor y alegría luego de que se emitieran a través de tablets emotivas palabras que hicieron llorar a más de uno de los trabajadores que lucharon para generar este acercamiento.
Ante la restricción de visitas presenciales de las familias de los pacientes al interior del Hospital Regional de Iquique los equipos clínicos del recinto idearon la forma de generar este acercamiento con gran éxito. Videollamadas a las comunas del interior de la región y a otras ciudades como Arica, Antofagasta y Calama permiten mantener el vínculo y dar tranquilidad alas personas.
Fue el Día del Padre el que abrió una positiva relación online que emocionó tanto a funcionarios como a los hombres hospitalizados que desde muy temprano ese día comenzaron a recibir los saludos de sus hijos, hijas, esposas, parejas, nietas y nietos. Los pasillos de los servicios clínicos se llenaron de amor y alegría luego de que se emitieran a través de tablets emotivas palabras que hicieron llorar a más de uno de los trabajadores que lucharon para generar este acercamiento.
“Esto se inició para el Día del Padre, ya que teníamos a muchos pacientes que eran papás en esa fecha y fue una sorpresa para ellos” explica la enfermera supervisora de la unidad de Traumatología del Hospital Regional Dr. Ernesto Torres Galdames, Jessica Astudillo, quien agrega que en esa oportunidad notaron los efectos positivos de estos contactos en el estado de ánimo y recuperación de los pacientes. “Mejoró bastantes su estado de ánimo, ya que es muy distinto hablar por celular que mirar a sus seres queridos”.
Las reacciones que generaron estos contactos llevaron al equipo clínico de Traumatología a idear una forma de establecer esta forma de comunicación como una práctica estable al interior de este servicio que al igual que el resto de unidades del centro de salud ve restringidas las visitas por la pandemia por la que atraviesa el país.
“A raíz de eso trajimos dos tablets con los que las enfermeras diurnas, a la hora que en que baja un poco la carga laboral, nos dedicamos a hacer videollamadas entre los pacientes y familiares”, señala la enfermera supervisora, quien agrega que se producen contactos con personas del interior de Iquique y otras ciudades. “Teníamos muchos mensajes de familiares que querían hablar con los pacientes. Les bajamos un poco la ansiedad al no poder verse y es algo que queremos mantener durante el tiempo”.