Hace unos días, cuando celebramos Navidad Mágica y más de 6.000 personas repletaron la avenida Arturo Prat, disfrutamos de una celebración que nos recordó lo importante que es la buena convivencia entre ciudadanos y su sentido de pertenencia con el territorio. Fue muy emocionante ser parte de ese gran momento, personas de todas las edades compartiendo una hermosa tradición en el espacio público, donde habita parte de la identidad de los tarapaqueños.
Al realizar un balance de este año que finaliza, puedo decir, de corazón, que hemos vivido momentos de alegría, de esperanza y de grandes desafíos que nos propusimos sacar adelante. El Plan Regional de Tarapacá, aprobado por el Presidente Sebastián Piñera con una cifra histórica de 845 mil millones de pesos, representa un enorme desafío para la región en los próximos cuatro años. En forma clara, realista y muy necesaria, nuestro gobierno está haciendo un enorme esfuerzo para tratar de disminuir brechas y mejorar la calidad de vida de todos los tarapaqueños.
Quiero que sepan que estamos absolutamente enfocados en lograr avances importantes en materia de vivienda, salud, seguridad, crecimiento y empleo, conectividad y medio ambiente; son las grandes tareas que estamos empujando con fuerza, cuando nuestra región se ubica entre las tasas de crecimiento más altas del país en número de habitantes.
El 2019 y los años que vienen en adelante demandarán nuevos esfuerzos, y el compromiso permanente de todas las autoridades, gremios, actores sociales y de la comunidad para que demos lo mejor de cada uno por esta tierra que tanto amamos.
Antes de finalizar este año, quiero pedirles que no olviden a aquellas personas que hoy están solas, por distintas razones, enfermos y adultos mayores, hay gestos que nos humanizan. Y de manera especial, les pido levantar la vista y poner atención en aquellos niños más vulnerables, para nuestro gobierno ellos están primero en la fila y tenemos una agenda muy exigente y muy urgente para proteger su desarrollo integral.
Que tengan un Feliz 2019 junto a sus familias y sus seres queridos. Que Dios los bendiga y que viva Tarapacá.